El jabón de Marsella es un producto versátil que se utiliza desde la época de nuestras abuelas para limpiar y desinfectar el hogar. Totalmente natural e hipoalergénico, está elaborado con aceites vegetales, sal y agua.
El jabón de Marsella es un limpiador multiusos que abrillanta los suelos, limpia la ropa e incluso perfuma el hogar. En resumen, es un producto incomparablemente versátil, ideal para las tareas domésticas.
El jabón de Marsella es un producto duradero que se ha transmitido de generación en generación. Tiene fama de poseer propiedades increíbles para el cuidado diario del hogar. A pesar de ser un producto ancestral, sigue haciendo furor en los hogares franceses por su eficacia.
Un producto ancestral con una historia increíble
El jabón de Marsella apareció a principios del siglo XIV. Elaborado con aceite de oliva, es uno de los jabones más producidos en el mundo. Como su nombre indica, este jabón procede de Marsella, donde se encuentran las fábricas que elaboran el producto. Hoy en día, el jabón de Marsella se fabrica en casi todas partes, pero su nombre original no ha cambiado.
Jabón de Marsella: ¿cuáles son sus propiedades?
El jabón de Marsella se distingue de los demás jabones por sus innumerables propiedades y su formidable eficacia. Es un producto milagroso muy solicitado en el hogar, que simplifica infinidad de tareas. Es ideal para abrillantar superficies domésticas, eliminar manchas difíciles y limpiar ropa y tejidos.
El jabón de Marsella también es el producto que necesita para el cuidado de la piel. Su suavidad deja la piel sedosa e hidratada, tanto en la cara como en el cuerpo. También es perfecto para pieles sensibles, ya que no contiene productos químicos ni aditivos que puedan irritar la piel.
Jabón de Marsella: un producto más respetuoso con el medio ambiente y el planeta
Si buscas un producto no contaminante y respetuoso con el medio ambiente, utiliza el jabón de Marsella. Es un producto de limpieza 100% natural que no contiene productos químicos. Por ello, es una opción más ecológica para limitar el uso de productos químicos tóxicos.
En lugar de utilizar productos industriales llenos de sustancias químicas, elija una alternativa más sana y ecológica como el jabón de Marsella, que además es menos costoso y más sostenible.