¿Qué tiene que ver una cerilla con nuestro baño?
El baño, más comúnmente llamado inodoro , es una de las estancias de la casa más utilizadas y también la que más se ensucia. Y es que sabemos que, cuando una habitación está sucia, inevitablemente desprende malos olores .
Entonces, ¿cómo remediar esto y tener un baño perfumado ? Tenemos un truco sencillo pero eficaz que nos ayuda. El truco del partido .
Y sí, la vieja cerilla, indispensable ante la llegada de los productos químicos, utilizada antaño por nuestros abuelos, resulta útil y eficaz para eliminar los malos olores de nuestros sanitarios.
Sabemos que la cerilla, después de quemarse, desprende azufre. El propio azufre es capaz de neutralizar los malos olores de nuestro baño. Así que basta con encender 1 o 2 cerillas para hacer más agradable tu estancia en el baño.
Eliminamos los malos olores del fregadero
Pero no nos olvidemos de la higiene. Siempre vaciamos la papelera del baño donde generalmente depositamos bastoncillos de algodón, toallitas desmaquillantes, etc. Además, para perfumar la cesta podríamos colocar en su interior un fajo empapado en aceite esencial.
Pasemos ahora a la limpieza del lavabo , quizás uno de los sanitarios más utilizados, responsable de los malos olores. De hecho, en el tubo de desagüe del fregadero, por todo lo que dejamos fluir, todo lo que utilizamos para nuestra higiene personal, se forman bacterias en las paredes del tubo que se estancan liberando malos olores.
En este caso viene al rescate el enjuague bucal , que utilizamos habitualmente para nuestra higiene bucal.
Simplemente vierte un poco en el tubo de drenaje, espera aproximadamente media hora y enjuaga con agua caliente. Si se utiliza como rutina diaria nos aportará un lavabo agradable y fragante.
Como ves, a veces basta con muy poco, en este caso una cerilla y un enjuague bucal, para eliminar malos olores, eliminar bacterias, hacer más confortables los ambientes.