Incluso las contraventanas más polvorientas volverán a quedar como nuevas con este consejo nunca antes revelado

La tarea doméstica de mantener la casa perfectamente limpia no es moco de pavo. Hay que asegurarse de que todos los rincones de la casa estén limpios, porque a menudo son ellos los que acumulan la suciedad y el polvo. Además, no hay que olvidar las zonas que menos se tocan. Esto es especialmente cierto en el caso de las persianas. Por eso, las manchas y el polvo se acumulan en las rendijas. A veces es difícil encontrar los productos y técnicas adecuados para limpiar a fondo las contraventanas. Pero una vez que haya descubierto este método, podrá renovarlas fácilmente.

Incluso las contraventanas de madera más polvorientas quedarán como nuevas con este truco nunca antes revelado.

La madera es uno de los revestimientos más delicados. Debido a la prueba del tiempo, pero también al impacto de los agentes atmosféricos, este material puede perder rápidamente su belleza. La falta de un mantenimiento adecuado es también una de las causas más comunes de que la madera pierda su calidad.

Al trabajar la madera, hay que tener cuidado de no mancharla ni decolorarla. Aunque la solución preventiva es evitar en lo posible la acumulación de suciedad, esto no es tan fácil de conseguir.

Uno de los mayores errores es limpiar las contraventanas inmediatamente con un paño y agua. Sin embargo, hay que proceder correctamente siguiendo estos pasos:

  • Elimine la primera capa de suciedad y polvo barriendo. También puedes utilizar una aspiradora. Si utilizas una escoba, asegúrate de que las cerdas sean suaves para no rayar la madera;
  • Al quitar el polvo, cierra los listones para asegurar una capa uniforme;
  • A continuación, utilice un cepillo de dientes para llegar a las zonas más inaccesibles sin dañar el suelo;
  • Elimine las manchas difíciles con un paño húmedo. Si necesita utilizar un detergente, limítese al jabón de Marsella o al detergente lavavajillas.

¿Y el mantenimiento de las persianas de hierro?

Los revestimientos de hierro son dos veces más resistentes que la madera. Pero eso no es motivo para utilizar productos agresivos. Para limpiarlas, aquí tienes los pasos a seguir:

  • Quita el polvo con una escoba suave;
  • Limpia las lamas con un paño de microfibra seco para eliminar los restos más resistentes;
  • Lavar con un paño húmedo, añadiendo un poco de detergente suave si es necesario;
  • Deje secar para dar a las lamas un acabado brillante.