o a todo el mundo le gusta una fregona para limpiar suelos . Sin embargo, son muchos los admiradores de este accesorio tan importante para la limpieza de nuestro hogar. Sin embargo, a veces sucede que no limpia exactamente como se esperaba. ¿Es culpa de la técnica? ¿Un poco de detergente? No siempre: muchas veces se debe a que no se limpia adecuadamente. Porque si es cierto que la fregona limpia, también lo es que debemos limpiar e higienizar la fregona con cierta frecuencia.
¿Cómo higienizar la fregona de forma rápida y sin dolor?
El caso es que si está sucia, aunque la utilices para lavar los suelos, lo único que harás será trasladar la suciedad de una parte de la casa a otra . Lo que también supone aumentar la proliferación de gérmenes y bacterias. Además de los malos olores.
¿Pero cómo desinfectar la fregona? En primer lugar, la frecuencia de la limpieza . En teoría deberías lavarlo después de 5-6 usos. Sin embargo, la frecuencia podría ser aún mayor en el caso de suelos que se ensucien especialmente. Pensemos, por ejemplo, en las escaleras de un edificio de apartamentos, con el paso constante de zapatos embarrados. O en el suelo de una casa donde hay perros y gatos entrando y saliendo del jardín con las patas embarradas.
Llegados a este punto sin embargo debemos lavar la fregona siguiendo estos pasos:
- Después de cada uso, lave la fregona con agua corriente.
- inmediatamente después remojarlo en un recipiente lleno de agua y el detergente que usamos para limpiar los pisos. Déjelo aquí durante 30 a 60 minutos y luego enjuáguelo con agua corriente.
- ahora lo hemos limpiado, pero también necesitamos desinfectarlo. Para ello necesitamos llenar un balde con agua y añadir un poco de vinagre de vino blanco . Déjalo en remojo durante una o dos horas, dependiendo de lo sucio que esté.
- También podemos añadir un poco de bicarbonato de sodio a todo para blanquearlo.
- deja que todo se seque al aire (nunca lo guardes cuando esté húmedo o mojado, ya que de lo contrario desarrollará malos olores)
- Si desprende un olor desagradable, también es posible dejarlo en remojo en agua y unas gotas de aceite esencial de árbol de té . Este último eliminará los malos olores (y además tiene acción antibacteriana)
Esto funcionará de maravilla siempre y cuando las cerdas del trapeador no se arruinen . En ese momento será necesario reemplazarlo . O incluso cuando sigue apestando a pesar de mil lavados realizados.