El árbol de jade es una planta muy popular y apreciada. Sin embargo, a veces su planta pierde su aspecto verde a medida que las ramas se secan y quedan vacías.
Pero no se desanime, porque aún es posible recuperar, reavivar y restaurar la vitalidad de su árbol de jade.
Lo único que tienes que hacer es seguir estos pasos esenciales para que tu planta prospere y se mantenga en perfecto estado de salud.
Poda
Para conseguir un árbol de jade que crezca adecuadamente y tenga un aspecto más frondoso, tienes que podarlo. Si tiene ramas secas y vacías, basta con cortarlas.
Para ello, córtalas haciendo cortes limpios por encima de un nudo de la hoja o de la unión del tallo. También debes eliminar las hojas muertas o amarillentas.
De este modo, tendrás una planta bien ordenada que concentra toda su energía en el crecimiento de hojas y tallos sanos.
Revise las condiciones de iluminación
Los árboles de jade pueden prosperar en un lugar luminoso sin luz solar directa. Si los colocas en una zona mal iluminada, los tallos de tu planta se estirarán en busca de luz.
Esto provoca un crecimiento deficiente y las hojas acaban por caerse. Los tallos también se secarán porque la planta no tiene energía para mantenerlos sanos.
Por todas estas razones, traslade su árbol de jade a un lugar más luminoso para favorecer un crecimiento sano y exuberante.
Gestión del riego
Si descuidas el riego de tu árbol de jade, las ramas pueden secarse debido a una hidratación deficiente.
Para ello, debes dejar que la tierra se seque por completo antes de volver a regar la planta. Debes darle agua suficiente para mantener las hojas verdes y los tallos sanos.
Reevalúe la maceta y la tierra
Cuando un árbol de jade crece, su maceta deja de ser adecuada, y la tierra tampoco. Si tiene una planta con muchas raíces, debe trasplantarla inmediatamente a una maceta más grande. Para las suculentas o los cactus, elige también una tierra con buen drenaje.
Esto es esencial si quieres que tu planta florezca en las mejores condiciones posibles.