Cuando entras en el cuarto de baño, la zona de la ducha no siempre está tan limpia como te gustaría. Por desgracia, esta zona tiene la desafortunada tendencia a ensuciarse con facilidad y a llenarse de moho debido a la alta concentración de humedad.
Sin embargo, tenga la seguridad de que esto no volverá a ocurrir. En este artículo, descubrirás algunos métodos naturales y económicos para mantener limpia la zona de la ducha. Te ayudarán a que tu plato de ducha brille y, al mismo tiempo, a eliminar el moho presente en algunos rincones de la ducha.
Bicarbonato sódico
El primer remedio que te propongo es el bicarbonato de sodio. Este ingrediente es conocido desde tiempos de nuestras abuelas por sus propiedades limpiadoras, desengrasantes y quitamanchas.
Para utilizarlo, mezcla en un bol 4 vasos de agua y un vaso de bicarbonato sódico. Mezcla bien para obtener un preparado homogéneo.
A continuación, aplícalo a lo largo de la superficie del plato de ducha y deja que actúe durante unos 10 minutos. Por último, acláralo todo y ¡tu plato de ducha estará limpio y brillante!
Para limpiar otros rincones concretos de la ducha, aplique el mismo compuesto sobre la mancha negra de moho utilizando una esponja. Déjalo actuar unos instantes antes de aclarar.
Vinagre
El otro ingrediente súper eficaz para abrillantar tu plato de ducha es el vinagre. Tiene excelentes propiedades desengrasantes y limpiadoras, además de una fuerte acción blanqueadora.
Vierte cantidades iguales de vinagre y agua en un pulverizador y agítalo enérgicamente para mezclar los ingredientes. A continuación, pulveriza la mezcla resultante sobre el plato de ducha, prestando especial atención a las zonas más sucias y a las manchas amarillas. Dejar reposar un rato y frotar con una esponja suave para eliminar la suciedad.
Pulveriza la misma mezcla sobre las zonas afectadas por el moho, deja reposar unos minutos y aclara. ¡Todo el moho de tu ducha habrá desaparecido!
Evita utilizar vinagre si tienes baldosas de mármol o piedra natural en el baño.
Ácido cítrico
Como alternativa al vinagre, también puedes utilizar ácido cítrico. Es un arma infalible para eliminar el moho e incluso la cal de forma natural.
Para ello, mezcla 150 gramos de ácido cítrico en 1 litro de agua y aplica la mezcla directamente sobre el plato de ducha y los rincones llenos de moho. Déjalo actuar unos minutos y frota con una esponja no abrasiva para eliminar la suciedad: ¡tu ducha quedará como nueva!