Cuando surge el tema del mantenimiento del jardín, mucha gente piensa en trucos como los posos del café y el bórax, que todos conocemos. Pero, ¿has oído hablar de los efectos beneficiosos del enjuague bucal para tus plantas?
Sólo con nombrarlo, podrías pensar que el enjuague bucal puede dañar las plantas, pero no es así en absoluto. Es un gran aliado para jardines y huertos y puede ahorrarte mucho dinero.
El enjuague bucal en las plantas: un abono con acción antifúngica
Hay al menos 7 maneras de utilizar el enjuague bucal en beneficio de tu jardín.
Para empezar, es útil para eliminar el moho y las infecciones fúngicas de las plantas, igual que lo hace para la boca. El enjuague bucal tiene potentes propiedades antifúngicas. Basta con mezclarlo con agua en una proporción del 25-75%, verterlo en un pulverizador y rociarlo sobre las plantas afectadas por infecciones.
También puedes utilizar el enjuague bucal como un excelente abono para tus plantas. Sólo necesitas una taza de enjuague bucal, sales de Epsom, detergente líquido, amoniaco y una lata de cerveza. Vierte la mezcla en un pulverizador. Como norma general, debes aplicar este abono cada 3 semanas.
Otras funciones importantes del enjuague bucal para tu jardín
Si observas un alto nivel de bacterias en tu jardín, puedes mezclar agua y enjuague bucal a partes iguales y pulverizar la solución sobre las zonas afectadas. Las bacterias se eliminarán, al igual que el mal olor causado por ellas.
También puedes desinfectar las herramientas de jardín con enjuague bucal. Procede del siguiente modo: sumerge las herramientas en agua caliente con un poco de vinagre y bicarbonato sódico. Sácalas, rocíalas con el colutorio y déjalas secar.
El enjuague bucal también puede utilizarse como repelente de mosquitos. Basta con ponerlo en un pulverizador y rociarlo sobre la zona donde están los mosquitos y también sobre la piel. El enjuague bucal es mucho más seguro que cualquier repelente de insectos.
También puedes utilizar enjuague bucal para solucionar el problema de la infestación de pulgones: mezcla agua y enjuague bucal a partes iguales y rocíalo sobre las hojas.