La colocación del rollo de papel higiénico en el baño es un aspecto que a menudo se pasa por alto, pero tiene un impacto significativo en la limpieza y la higiene. Diferentes escuelas de pensamiento han debatido sobre la mejor forma de colgar el rollo, considerando también la facilidad de uso. Analicemos los distintos factores que juegan un papel crucial en este contexto.
Orientación del rollo de papel higiénico
La cuestión de la orientación del rollo de papel higiénico está en el centro de muchas discusiones . La mayoría de los expertos sugieren colocar el rollo de forma que la hoja mire hacia afuera, lo que tiene varias ventajas. En primer lugar, al mantener la lámina alejada de la pared, se reduce el contacto con superficies potencialmente contaminadas por bacterias, hongos o moho. Esto es especialmente importante en entornos públicos o en hogares con varias personas.
Otro aspecto positivo de esta disposición es la facilidad de acceso . Cuando el rollo está orientado hacia afuera, es más fácil agarrar y arrancar un trozo de papel, lo que minimiza el contacto con otras superficies cercanas, como el propio dispensador o la pared. Por el contrario, si el rollo se coloca con la hoja hacia la pared pueden surgir diversos problemas. En primer lugar, el contacto con la pared aumenta el riesgo de contaminación. Además, la operación de extracción del papel se vuelve más compleja, especialmente si el dispensador está instalado demasiado cerca de la pared.
Ubicación del dispensador de papel higiénico
Además de la orientación del rollo, la posición del dispensador es esencial para garantizar un uso práctico e higiénico. Es aconsejable colocarlo a una altura aproximada de 66 cm del suelo, para que sea accesible a todos los usuarios. Esta altura estándar permite un fácil uso por parte de adultos y niños, evitando esfuerzos excesivos.
Además, es aconsejable mantener el dispensador alejado de fuentes de agua como lavabos o duchas. Esta precaución es para evitar que el papel higiénico se moje, lo que podría provocar una contaminación no deseada . La ubicación estratégica del dispensador ayuda a mantener el rollo seco y limpio, garantizando así una mayor higiene durante su uso.
Estrategias para mejorar la higiene
Implementar algunas estrategias puede mejorar aún más la higiene del baño. El uso de dispensadores automáticos de papel higiénico es una solución eficaz, ya que minimiza el contacto directo entre las manos de los usuarios y el propio dispensador. Estos sistemas automatizados pueden ayudar a mantener un ambiente más limpio, especialmente en entornos públicos donde hay un gran flujo de personas.
También es aconsejable tener toallas de papel y una papelera cerca del dispensador. Esto facilita la eliminación de otros residuos sanitarios, ayudando a mantener el área del baño ordenada e higiénica. La presencia de estos elementos facilita a las personas la gestión adecuada de los residuos y reduce el riesgo de acumulación de papel u otros materiales no eliminados correctamente.