Seamos realistas, las ventanas son la parte más hostil y a veces complicada de limpiar, especialmente después de un día lluvioso.
Uno de los principales retos a los que nos enfrentamos a la hora de limpiar son los halos , esas desagradables manchas que nos atormentan y que para comprobar que no están ahí nos situamos en la misma dirección que la luz, en la dirección contraria y así sucesivamente.
En definitiva, revisamos cada pequeño rincón, pero no siempre conseguimos tenerlos relucientes e impecables , por lo que aún nos caen manchas no deseadas.
Bueno, hoy veremos juntos el método de la abuela para limpiar las ventanas y que no queden rayas incluso a contraluz.
¿Cuál es el método?
Antes de ver los remedios para limpiar bien los cristales , ¡tenemos que desvelarte el truco de la abuela!
La fase crítica durante el lavado del vidrio es el secado , porque es en ese momento cuando se forman las marcas debido al agua en contacto con el material.
Normalmente se utilizan paños de microfibra o cuero, pero en realidad una camisa vieja de algodón o una sábana vieja es suficiente.
Lo importante es que no sean de un material rugoso como, por ejemplo, los paños de cocina, porque sino corres el riesgo de rayar el cristal.
Así que, si tienes alguna de estas cosas que ya no usas, córtala y haz unos trapos con ella . Cuando mojes las ventanas, sécalas con estos paños y verás ¡qué excelente resultado obtendrás!
¡Pero ahora toca ver cómo limpiar las ventanas correctamente usando este truco!
Limpieza diaria
En primer lugar, veamos cuál es el mejor método a adoptar para la limpieza diaria de cristales.
De hecho, la primera solución absoluta para no dejar rayas es lavarlas todos los días , para que la suciedad y el polvo no se acumulen y luego tengan dificultades para salir.
Bicarbonato
El bicarbonato es un elemento fundamental en la limpieza diaria del hogar, sobre todo si necesitas blanquear algunas superficies, limpiarlas o darles brillo.
Precisamente por eso es importante utilizarlo para tener siempre el cristal brillante . ¡Además, es un viejo truco de la abuela que nunca te dejará decepcionado!
Lo único que tienes que hacer es verter medio litro de agua y 1 cucharada y media de bicarbonato de sodio en una botella con atomizador .
Agita todo bien y recuerda hacerlo cada vez que lo uses porque el bicarbonato tiende a quedarse en el fondo.
¡En este punto solo tienes que rociar la mezcla sobre el vidrio y pasarlo directamente con el paño que creaste para secar!
polvo de talco
¡Hoy en día hay quienes no pueden decir que no al uso de talco para lavar y pulir ventanas!
Este polvo, del que guardamos un grato y bonito recuerdo desde que lo usábamos cuando éramos niños, resulta ser un método excelente para tener el cristal siempre brillante.
El truco es muy sencillo, basta con verter 2 cucharadas de talco en 700 ml de agua en un vaporizador en spray. Mezcla y agita bien porque, al igual que el bicarbonato, el talco también se acumula en el fondo.
Pulveriza sobre las ventanas y seca con trapos de algodón , verás qué limpio y ¡qué excelente aroma esparcirá por toda la casa!
Para vidrio muy sucio
Ahora toca ver cuáles son las mejores soluciones para los cristales muy sucios , es decir, los que solemos tener tras un día de lluvia .
Vinagre
En este caso, ¡el vinagre viene a rescatarnos para que todo brille en poco tiempo!
Si hay una propiedad que nos encanta de este ingrediente es su capacidad para pulir las superficies sobre las que se utiliza, como por ejemplo el acero.
Pues en este caso lo que debes hacer es llenar un recipiente con agua tibia y verter en su interior un vaso de vinagre .
Puedes utilizar una esponja suave (que también se suele utilizar si quieres limpiar los cristales con jabón amarillo ) o un paño de microfibra.
Haz una primera pasada con abundante agua para quitar toda la suciedad, enjuaga y luego escurre bien la esponja o paño, vuelve a pasarla y finalmente seca con el trapo de algodón!
Limón
Para una limpieza profunda, el limón también es un excelente remedio, que suele preferirse al vinagre debido a su olor embriagador.
Por tanto, si prefieres obtener un vaso perfumado además de limpio, simplemente pon en un recipiente con agua tibia el zumo filtrado de dos limones .
Para intensificar el olor también puedes dejar las cáscaras de limón dentro del bol.
El procedimiento para limpiar los cristales es el mismo que el indicado anteriormente con vinagre, así que utiliza un paño de microfibra o una esponja suave para lavar y utiliza el trapo de algodón para secar.
Advertencias
Te recuerdo que pruebes los métodos primero en un rincón escondido para no dañar el vidrio.