Eche detergente en polvo en el inodoro antes de acostarse: ¡no creerá lo que ven sus ojos!

Limpiar los inodoros no es tarea fácil, pero resulta casi inevitable a diario. Desinfectar los inodoros es esencial para eliminar las bacterias que los invaden.

Pero no vayas a envenenar tu salud con productos como la lejía. Basta con el producto que utilizas normalmente para solucionar el problema. El resultado: ¡inodoros limpios y sin manchas!

Si utilizas este método para limpiar bien los inodoros, podrás ahorrar mucho dinero, ya que no tendrás que comprar productos comerciales caros.

Limpiar los inodoros con detergente en polvo: ¿cómo hacerlo?

Los inodoros pueden convertirse en un caldo de cultivo de gérmenes y bacterias si descuidas su limpieza diaria. Para dejarlos perfectamente limpios y perfumados, pruebe este método sencillo y eficaz.

Para limpiar el inodoro en un abrir y cerrar de ojos, vierte de 2 a 3 cucharadas de detergente en polvo en la taza. Déjelo toda la noche. Luego, por la mañana temprano, friega enérgicamente con el cepillo del váter. A continuación, tira de la cadena y voilà, el inodoro estará impecable y sin manchas.

Este método de limpieza es increíblemente eficaz para neutralizar los restos de orina que se forman en la taza del inodoro.

Para una limpieza sin igual, rocíe una cantidad generosa de vinagre en todas las partes de su inodoro, incluyendo la taza, el asiento y la tapa. Este producto natural elimina las manchas de cal y desinfecta todo el inodoro.

Al final del proceso de limpieza, tendrás un inodoro limpio, sin olores desagradables ni rayas.

¿Qué otro ingrediente natural puede limpiar el inodoro con tanta eficacia?

No es necesario invertir en productos caros y cargados de productos químicos para tener un inodoro impecable. La solución natural más sencilla es el bicarbonato sódico.

Las virtudes limpiadoras del bicarbonato no necesitan presentación. Es un producto versátil y muy eficaz para limpiar inodoros. Para ello, vierta ½ vaso de bicarbonato de sodio en el fondo de la taza y, a continuación, añada ½ vaso de vinagre blanco.

Juntos, estos dos ingredientes producen una reacción química que neutralizará todas las incrustaciones de su inodoro. Déjalo reposar durante media hora antes de fregar a fondo las paredes de la taza. Tira de la cadena y ¡listo!