No pierdas más tiempo, pon una ramita de lavanda bajo tu almohada y ¡verás lo que pasa! Ni te lo imaginas.
Los beneficios naturales de ciertos tipos de plantas empiezan a ser de dominio público. Es el caso de la manzanilla, que tiene propiedades específicas que pueden relajar el cuerpo. Pero la lista sería interminable si tuviéramos que mencionarlas todas.
Otra planta muy eficaz no sólo para el bienestar, sino también para la limpieza del hogar, es la lavanda. Gracias a su incomparable aroma, se puede utilizar de muchas maneras. Con ella puedes refrescar las cortinas sin tener que lavarlas regularmente. Pero sus propiedades no acaban ahí. Hoy te voy a contar por qué, a partir de ahora, deberías poner siempre lavanda debajo de la almohada.
¿Lavanda bajo la almohada? Tendrás que hacerlo a partir de esta noche
Además de ser una planta muy aromática, la lavanda tiene innumerables propiedades insospechadas. Una de ellas es la capacidad de controlar la ansiedad y limitar sus efectos en el organismo.
El principal componente de la lavanda es el linalool. Según algunos estudios recientes, este elemento es capaz de curar la ansiedad y calmar sus efectos indeseables.
Cuando se sufre ansiedad, no se puede conciliar el sueño plácidamente ni conseguir un sueño continuo y duradero. A largo plazo, los problemas de sueño pueden llegar a ser agotadores, alterando tu rutina diaria.
Por eso es necesario encontrar rápidamente una solución, y mejor aún si es completamente natural.
Ahí es donde entra en juego la lavanda. Si pones una ramita de lavanda o una bolsita de flores secas debajo de la almohada antes de acostarte, podrás dormir plácidamente. Un método muy sencillo pero muy eficaz.