Si te gusta cultivar hortalizas, debes saber que el trasplante de tomates al suelo es una de las fases más importantes del cultivo de esta hortaliza de fruto.
Por eso, debes planificarlo cuidadosamente para asegurarte una cosecha próspera con tomates grandes y sabrosos.
En este artículo, descubrirás cuál es el mejor momento para plantar tomates en el suelo. También compartiremos algunos consejos prácticos para que este paso sea un éxito.
¿Cuándo trasplantar tomates este año?
Si piensas trasplantar tus tomates al suelo, esto depende del clima de cada región. En general, hay que esperar a las heladas tardías y a que las temperaturas nocturnas superen los 10 grados.
Para este año, he aquí algunas indicaciones de las previsiones meteorológicas para algunas regiones de Francia:
- Sur de Francia: los tomates pueden trasplantarse a mediados de abril, cuando las temperaturas empiezan a estabilizarse por encima de los 10 grados.
- Centro de Francia: el momento ideal para trasplantar tomates es entre finales de abril y principios de mayo.
- Norte de Francia: se recomienda trasplantar los tomates a partir de mediados de mayo, cuando las heladas hayan pasado por completo.
Sin embargo, se trata sólo de previsiones. Antes de trasplantar definitivamente los tomates a la tierra, conviene consultar las previsiones meteorológicas.
¿Cómo trasplantar los tomates con éxito?
Acostumbrar a las plantas al trasplante
Antes de empezar el trasplante, hay que aclimatar las tomateras a las temperaturas exteriores. Para ello, colócalas en el exterior durante unas horas al día. Después, aumenta gradualmente este tiempo durante una semana antes del trasplante.
Preparar el suelo
Los tomates crecen bien en suelos ricos, bien drenados y ligeramente ácidos, con un pH de 6,0 a 6,8. Alimenta la tierra con compost y abono orgánico. Alimente el suelo con compost y estiércol bien descompuesto antes del trasplante.
Mantener cierta distancia entre plantas
Las plantas de tomate deben estar bien espaciadas para que puedan desarrollarse plenamente evitando enfermedades. Para ello, mantén una distancia de 60 a 90 cm para las tomateras en rama y de hasta 1,5 metros para las especies trepadoras.
Riega las plantas con regularidad
Para evitar problemas como la podredumbre de la flor y el agrietamiento del fruto, hay que regar los tomates con regularidad. En épocas secas, riega todos los días, y cada dos o tres días en épocas normales.