Si alguna vez has tenido prisa, has tenido que ducharte y te has encontrado fastidiado porque el espejo del baño está empañado y no puedes terminar de arreglarte porque no ves nada, los consejos que te vamos a dar hoy son perfectos para ti. Desde soluciones de alta tecnología hasta otras más prácticas e inmediatas: aquí hay algunos consejos muy útiles.
El guión es siempre el mismo para todos. Quizás tenemos prisa por la mañana o antes de acostarnos, nos damos una ducha rápida y para terminar de arreglarnos necesitamos el espejo del baño. El problema, sobre todo cuando empieza la temporada de frío, que nos obliga a mantener la ventana cerrada, es que el vapor que desprende el agua caliente la ha empañado por completo .
Para solucionar este molesto problema, las industrias de alta tecnología han inventado espejos antivaho que, gracias a películas calefactoras aplicadas en la parte trasera o a luces LED, mantienen su poder reflectante incluso cuando hay vaho clásico en el baño.
Sin embargo, para nosotros los amantes de los remedios rápidos y prácticos , para poner en práctica quizás con lo que tengamos en casa, afortunadamente existen soluciones alternativas que no nos obligan a cambiar los muebles del baño.
La espuma de afeitar es una de las más rápidas. Aplicando un poco sobre el espejo y enjuagándolo, crearemos una especie de barrera sobre él que repelerá el vapor y evitará que se asiente y lo empañe. Dejar correr agua fría antes de entrar en la ducha regulará la temperatura dentro de la habitación y en consecuencia el vapor que se formará será mucho menor. También cabe destacar los sprays específicos , que al igual que la espuma de afeitar crean una barrera protectora, pero que deben adquirirse específicamente para este uso.
El más práctico y que da un resultado casi inmediato es el secador de pelo . Al encenderlo y apuntarlo directamente al espejo, la condensación desaparecerá enseguida, permitiéndonos continuar con nuestros preparativos.