¡En el baño siempre es un placer tener toallas perfumadas y suaves para abrigarte después de una agradable ducha!
Sin embargo, el paso del tiempo pone límites a esta maravillosa sensación porque las fibras de las toallas se relajan endureciéndolas .
Con el tiempo, se han probado varios métodos, pero los antiguos remedios de la abuela, como sabemos, ¡siempre ganan!
¡Hoy te contaré cómo suavizar toallas duras con el método del cepillo de dientes!
como hacerlo
Veamos primero cómo hacer este truco sencillo y rápido, ¡pero sobre todo consigue darle nueva vida a las toallas!
En primer lugar, tomemos lo que necesitamos, es decir, un cepillo de dientes. Ahora te preguntas qué tipo de cepillo de dientes es el más adecuado.
Pues con el usado para la manicura de forma rectangular será suficiente , ¡quedará perfecto en nuestro caso!
Así, cuando hayas terminado de lavar y secar las toallas, solo tendrás que agitarlas, extenderlas sobre una superficie y frotar suavemente el cepillo de dientes sobre ellas .
¿Para qué sirve este paso? ¡Simple, las fibras recuperarán su suavidad en poco tiempo y dejarán la toalla nuevamente suave!CÓMO RECUPERAR LAS TOALLAS SUAVES
Consejos de lavado
Decíamos que el método del cepillo de dientes se realiza después de lavar las toallas.
Sin embargo, conviene asegurarse de que esto último también sea eficaz para preparar las toallas para que se ablanden bien.
En este sentido, ¡veamos juntos algunos consejos de lavado que puedes implementar cada vez que tengas que lavarlos!
Suavizante natural
¡El primer consejo es, sin duda, utilizar un suavizante natural!
Puede parecer extraño, pero a veces son precisamente determinados tipos de suavizante o la cantidad excesiva utilizada lo que apelmaza el tejido de las toallas y las endurece.
Así que adopta una alternativa natural mezclando 150 gramos de ácido cítrico en 1 litro de agua , luego agrega 10 gotas de aceite esencial de tu elección (te recomiendo el delicado de lavanda) y haz que todo se convierta en una única solución.
En este punto sólo tendrás que poner 100 ml de producto en la cubeta adecuada para cada lavado.
Usa bicarbonato de sodio
Usar bicarbonato de sodio es otra excelente solución para tener toallas perfectas, ¡especialmente cuando se lavan blancas o muy claras!
El bicarbonato no se infiltra en las fibras y ayuda a disolver todo el polvo y las manchas que se infiltran en el tejido.
Lo que tendrás que hacer es simplemente poner 1 cacito de producto en el cesto antes de lavar y ¡listo!
¡Serán tan blancos como la nieve!
Zumo de limón
Pasemos ahora a un antiguo remedio de la abuela que se utilizaba principalmente para lavarse las manos, ¡pero que también queda fantástico en la lavadora!
El limón es el cítrico más versátil y famoso del mundo, ¡nadie puede prescindir de él! Bueno, debes saber que el jugo de limón es excelente tanto para blanquear como para suavizar las toallas.
Basta con poner 1 cucharada de producto bien filtrado en el cajón del detergente o 1 cuchara dosificadora directamente en el cestillo.
¡El resultado será fantástico!
aceite de árbol de té
Cuando queremos una sensación envolvente de aroma fresco, suavidad y limpieza, ¡hay que confiar en el aceite de árbol de té!
Cada vez más personas confían en este ingrediente de la lavadora y sólo obtienen beneficios de él.
Para utilizarlo correctamente, lo único que tienes que hacer es poner 1 taza de vinagre con 1 cucharadita de aceite de árbol de té en el compartimento del suavizante y comenzar el lavado.
cuando se secan
El último consejo está indicado durante la fase de secado con toalla .
Como están hechos principalmente de esponja, tendrás que asegurarte de que estén perfectamente secos antes de sacarlos del tendedero.
Al mismo tiempo, no dejes que se sequen y se pudran afuera en el balcón porque este descuido es otra de las causas de su dureza.
Advertencias
Recuerdo leer siempre las etiquetas de lavado para poder realizar correctamente todos los pasos necesarios para tener unas toallas perfectas.