Cuidar a tu perro no significa solo abrazarlo, sacarlo a pasear y llenar su plato de comida. También significa limpiar y desinfectar tanto el recipiente de comida como el de agua . Y esto no una vez al año o cuando las incrustaciones se vuelven dignas de no desfigurarse en un cuadro abstracto. Después de todo, lavas los platos todos los días, ¿verdad?
¿Cómo limpiar el comedero para perros?
El hecho es que el plato de comida puede albergar residuos microscópicos de comida en los que pueden crecer bacterias o moho . A veces no es visible a simple vista. Esto significa que el comedero del perro debe lavarse todos los días. De hecho: cada vez que come, conviene limpiarlo.
Eso sí, esto es un poco complicado para los perros que llevan una dieta ad libitum , por lo que el cuenco siempre está lleno y el perro decide cuándo comer (un poco como lo hace un gato). Pero en este caso, al menos una vez al día hay que vaciar ese cuenco de restos de comida y limpiarlo.
Lo mismo ocurre con el cuenco de agua. Hay que vaciarlo y rellenarlo todos los días, lavándolo entre un vaciado y otro para evitar que se formen rayas y moho .
Para la limpieza hay que recordar no utilizar las esponjas que utilizamos para limpiar nuestra vajilla. De hecho: precisamente para evitar la contaminación cruzada, sería mejor no lavar el cuenco del perro (o del gato) en el fregadero de la cocina.
Lo primero que debemos hacer es tirar los restos de comida. Si hay incrustaciones de comida en el recipiente, se deben eliminar con agua caliente. Luego procedemos con el lavado propiamente dicho. La FDA sugiere usar una mezcla de lejía y agua para desinfectar el recipiente, luego enjuagarlo bien y luego pasarlo por el lavavajillas .
Alternativamente, puedes utilizar detergentes para platos , teniendo cuidado de elegir aquellos inodoros (los cuencos podrían adquirir un olor desagradable para el perro). Ni que decir tiene que tanto si se utiliza lejía como detergente , hay que aclararlos bien antes de devolvérselo al perro. Debes asegurarte de haber eliminado cualquier residuo de jabón , detergente o lejía del bol para evitar una ingestión accidental.
Si quieres un remedio natural , simplemente puedes utilizar vinagre de vino blanco caliente , que también actúa como desinfectante.