No hay nada más bonito que sumergir tu rostro en suaves toallas que parecen envolver tu piel en una dulce caricia. Sin embargo, no siempre encontramos esta suavidad porque con el tiempo tienden a volverse ásperos y secos debido a métodos incorrectos de lavado y secado.
Si crees que tienes que recurrir a suavizantes disponibles en el mercado, estás lamentablemente equivocado: de hecho, es posible utilizar algunos ingredientes naturales para dejarlas muy suaves. ¡Hoy, de hecho, veremos juntos cómo hacer que las toallas aún más viejas vuelvan a ser suaves y perfumadas !
como lavar
A menudo son los malos hábitos en los métodos de lavado los que hacen que nos queden las toallas duras, así que veamos cómo lavarlas correctamente.
- Pon en el cesto sólo las toallas : dedicar un lavado exclusivo a las prendas sobre las que quieres actuar concretamente es el primer paso para conseguir el objetivo esperado. Así que si quieres toallas suaves, ponlas y nada más en la lavadora.
- Secar al aire libre : es de fundamental importancia intentar lavar las toallas en un periodo del día propicio para el secado al aire libre. Si utilizas la secadora, programa programas con temperaturas bajas.
- Abrir el tambor inmediatamente después del lavado : es importante abrir la puerta de la lavadora al final de un ciclo de lavado para que el agua no quede impregnada en las fibras del tejido, sino que pueda evaporarse adecuadamente.
- Secar bien : además de preferir el secado al aire libre, es necesario secar hasta la última gota de agua de las toallas. A veces, con las prisas por reutilizarlos, se vuelven a guardar húmedos en el armario: esto provoca su endurecimiento y, sobre todo, malos olores.
- No utilizar demasiado detergente : el último y común problema es el uso demasiado extendido y excesivo de detergente , la cantidad de producto no eliminada por el agua queda entre las fibras de las toallas y las endurece.
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Manzanilla
El primer remedio que queremos ofrecerte para que tus toallas ásperas vuelvan a ser suaves es utilizar manzanilla. Pues sí, aunque parezca extraño, este ingrediente no sólo tiene efectos calmantes y relajantes sobre nuestra psique , sino que también tiene la capacidad de “ relajar ” las fibras de nuestras toallas.
Para probar este remedio totalmente natural, todo lo que necesitarás es:
- 1 litro de agua
- 2 sobres de manzanilla.
Calienta el litro de agua al fuego hasta que hierva. Una vez que rompa a hervir , apaga el fuego e infusiona los sobres de manzanilla . Cuando el contenido de la cacerola se haya enfriado por completo, viértelo en un recipiente con agua y sumerge las toallas ásperas para que se ablanden por dentro .
Déjalas en remojo durante unos 10 minutos, luego exprímelas y colócalas en un lugar ventilado , asegurándote siempre de no exponerlas a la luz solar directa. Te aconsejamos remojar toallas que ya hayan sido previamente lavadas y enjuagadas; la manzanilla, de hecho, sólo sirve para suavizar y no para lavar e higienizar.
Ácido cítrico
Otro método muy eficaz para suavizar tus toallas pasa por el uso de un compuesto biodegradable y ecológico: el ácido cítrico . Este ingrediente se presenta como una alternativa válida y más ecológica al vinagre a pesar de tener la misma eficacia. De hecho, cuenta con propiedades limpiadoras y suavizantes y es capaz de absorber los malos olores.
Luego dejar disolver 150 gramos de ácido cítrico en un recipiente que contenga un litro de agua . En este punto, sumerge las toallas en el recipiente y déjalas en remojo durante unas horas. Enjuague, deje secar y sus toallas se sentirán inmediatamente más suaves al tacto.
Bicarbonato
El bicarbonato de sodio también es un ingrediente natural que puede suavizar las toallas. Simplemente añade dos cucharadas de bicarbonato de sodio en un recipiente que contenga agua fría y sumerge en su interior las toallas a lavar y suavizar. Déjalos en remojo durante unas horas o toda la noche y luego enjuágalos.
Alternativamente, también puedes proceder con el lavado a máquina. En este caso, añade una cucharada de bicarbonato directamente al cajón del detergente e inicia el ciclo de lavado normal. Recuerde, sin embargo, configurar el ciclo de centrifugado en delicado.
vinagre blanco
Otro ingrediente de la despensa que puede venir a rescatarte para suavizar las toallas que pican es el vinagre blanco , que tiene una acción emoliente capaz de separar las fibras adheridas a la ropa ¡ haciéndolas extremadamente suaves!
Además, por si fuera poco, ¡es una bendición para eliminar los malos olores impregnados, como el olor a humedad por ejemplo!
Por lo tanto, todo lo que tienes que hacer es verter 4 cucharadas de vinagre en el compartimento del suavizante y luego iniciar el ciclo de lavado en la lavadora. Si además quieres aportar un buen aroma, entonces puedes añadir a la mezcla una cucharadita de gotas de aceite esencial de la fragancia que prefieras.
Sin embargo, si quieres continuar con el lavado de manos , puedes agregar la misma cantidad de vinagre a un balde que contenga agua y luego remojar las toallas : ¡quedarán suaves como nunca antes!
Limón
Después del bicarbonato, el vinagre y el ácido cítrico, como no podía faltar el limón , el cítrico con propiedades blanqueantes, antical, limpiadoras, desengrasantes y antiolores. De hecho, te recordamos que es una bendición para dejar la ropa limpia, fresca y fragante.
Luego vierte el jugo de 3 limones con medio litro de agua y luego agrega 2 tapones dosificadores de este suavizante natural casero en la bandeja de la lavadora. Luego, inicia el ciclo de lavado y ¡listo!
Jabón de Marsella
Evidentemente, no podíamos dejar de mencionar el jabón de Marsella , conocido desde nuestras abuelas por sus delicadísimas propiedades limpiadoras. ¡Y además es el mejor producto ecológico para obtener ropa perfumada! Entonces, todo lo que tienes que hacer es agregar 2 cucharadas de hojuelas o líquido en la tina de la lavadora o directamente en el tambor y ¡listo! Si quieres intensificar el olor, ¡puedes probar el truco de la toalla !
Sal, bicarbonato de sodio y vinagre.
Por último, puedes combinar diferentes remedios naturales para obtener una mezcla ganadora y tener unas toallas muy suaves incluso sin suavizante. Siempre necesitarás el famoso barreño de agua tibia, en el que echarás un vaso lleno de vinagre , 50 gramos de sal fina y 30 gramos de bicarbonato . Además de las propiedades suavizantes del bicarbonato y del vinagre, la sal equilibra la dureza del agua , muchas veces rica en piedra caliza y por tanto responsable del endurecimiento de las toallas.
Sumerge las toallas y déjalas en remojo un rato . Después de dejarlos secar completamente, hay un pequeño truco que puedes seguir. Para “levantar” las fibras de la toalla y darle un aspecto suave a tu toalla, muchas personas pasan un cepillo suave sobre el tejido , restableciendo la función de las fibras y revitalizándolas. ¡De esta manera quedarán como toallas nuevas!
Lámina de aluminio
¿Sabías que utilizar papel de aluminio en la lavadora es una excelente forma de evitar paños muy duros? Pues sí, el aluminio, gracias a sus propiedades, mantendrá suaves las fibras de algodón, haciendo que tu ropa sea suave. Arruga un poco de papel de aluminio y colócalo en el tambor de la lavadora, luego comienza el lavado normal.
como prevenir
Una vez que hayamos visto cómo suavizar las toallas ásperas, veamos juntos otras pequeñas precauciones a tener en cuenta para prevenir el problema. En primer lugar, es recomendable no sobrecargar la lavadora cuando lavamos toallas, ya que esto provoca que queden ásperas o se arruguen. Luego utilice la temperatura de lavado adecuada , recordando que lo ideal es lavar a 60° para toallas blancas y a 40° para toallas de colores.
Por último, te aconsejamos no utilizar demasiado detergente para no comprometer la suavidad de las toallas. De hecho, los residuos de detergente , junto con la cal, representan una de las causas de que las toallas estén ásperas y de que la ropa no sea óptima .