Para secar el cabello sin causar daños es fundamental retirar el exceso de agua después del lavado.
Una vez hecho esto, puedes utilizar el secador o cualquier otro accesorio específico para tu cabello, recordando poner una temperatura que no sea alta, porque correrías el riesgo de quemarlo, y tampoco demasiado baja, porque podría encresparlo.
Exagerar con el uso del secador, u otras herramientas utilizadas para peinar tu cabello, puede tener efectos negativos y dañarlo aún más. Además, es recomendable evitar el uso de temperaturas demasiado altas ya que tienden a quemar nuestro cabello, especialmente si no se utilizan protectores térmicos.
Por este motivo, existen procedimientos a seguir que pueden ayudarte a secar tu cabello lo mejor posible sin tener miedo de dañarlo:
- Cómo preparar tu cabello para el secado
- Cuando usar el secador de pelo
- Que accesorios elegir
- Presta atención a la temperatura.
1. Antes de secar el cabello es imprescindible retirar el exceso de agua, utilizando una toalla de microfibra. Después de secarte el cabello con una toalla, puedes peinarlo con un peine de púas anchas para eliminar posibles nudos.
Dicho esto, aplica los productos que más te gusten para peinar, por ejemplo cremas, aceites o geles. Es preferible dejar que tu cabello se seque al aire inicialmente, esto te permitirá reducir el tiempo que tu cabello está estresado bajo el calor del secador de pelo.
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2. Antes de iniciar el proceso de secado, es recomendable aplicar un protector térmico en todo el cabello, desde la raíz hasta los largos, para evitar que las altas temperaturas dañen nuestro cabello.
Además, la elección del secador debe hacerse con cuidado:
Secadores iónicos: están llenos de iones que ayudan a combatir y contrarrestar el frizz. Son ideales para cabellos con mucho cuerpo y gruesos y tienen tiempos de secado muy rápidos.
Secador de pelo de cerámica: estos, en cambio, tienen muy pocos iones, por lo que no son aptos para personas con cabello encrespado. El revestimiento cerámico permite distribuir el calor de manera uniforme y es ideal para cabellos delicados, envejecidos y finos, y consigue mantener el volumen y el movimiento.
3. Si tienes el cabello rizado, lo ideal sería utilizar un difusor para el secado, que te permitirá mantener el rizo definido y sin efecto frizz.
Si tienes el cabello liso u ondulado, un secador de pelo con boquilla concentradora es la elección correcta. El chorro de aire será más directo y te permitirá tener más control sin necesariamente obtener un efecto frizz.
4. Es fundamental mantener la temperatura bajo control, el calor medio es adecuado para alisar sin quemarse.
Las bajas temperaturas prolongan el secado y también pueden aumentar el frizz. Para facilitar el secado, comienza desde la raíz y avanza a lo largo, asegurándote de mantener una distancia de al menos 10 centímetros y reduce gradualmente el calor del pohn a medida que avanzas con el peinado.