¿Tiene una orquídea con hojas flácidas y caídas? Su planta necesita cuidados inmediatos para salvarla rápidamente.
Orquídea con hojas blandas y caídas: ¡cómo salvarla inmediatamente!
¿Ha notado que su orquídea empieza a tener las hojas blandas y caídas? Esto significa que su planta necesita muchos cuidados para mantenerse en plena forma. ¿Cuáles son las causas más comunes de este problema y cómo puedes solucionarlo?
Suministro de agua muy escaso
Si se encuentra con una orquídea que tiene las hojas blandas y caídas, puede deberse a la falta de riego. Aunque este tipo de plantas no necesitan mucha agua, un riego insuficiente puede hacer que las hojas se marchiten y adquieran un aspecto muy antiestético.
Y si observas el resto de la planta, verás que la tierra y las raíces también están muy secas.
Para solucionar este problema, tienes que regar la planta rápidamente y mantener las raíces y la tierra húmedas.
Riego excesivo
A las orquídeas no les gusta tener poca agua, pero tampoco demasiada.
Un riego excesivo puede arrugar y marchitar las hojas. El motivo es que el exceso de agua pudrirá las raíces y la planta, con sus raíces muertas, ya no podrá absorber bien el agua ni los nutrientes esenciales.
Para poner fin a este problema, simplemente evite regar en exceso su orquídea. Riegue sólo cuando la tierra esté seca.
Si observa que las raíces están lacias y de color negro o marrón, su planta no goza de buena salud y debe podarla para que se recupere.
Enfermedades
Las orquídeas pueden verse infestadas por enfermedades. Las plagas más comunes que arruinan sus plantas son los pulgones, los ácaros y las cochinillas.
Si ves puntos blancos o manchas negras en las hojas, debes actuar de inmediato utilizando remedios naturales como el bicarbonato de sodio o la leche para neutralizar estos parásitos.
Si consigues seguir estos consejos prácticos, podemos garantizarte que tus plantas que han tenido hojas blandas y caídas volverán a estar sanas, fuertes y vigorosas. Basta un poco de acción para salvarlas.