Probablemente no exista mejor producto que la plata para los utensilios de cocina. Las casas lo utilizan recurrentemente para la elaboración de sus artículos. Todo bien, salvo la dificultad para pulir la plata oxidada. De hecho, con el tiempo tiende a perder su brillo inicial. Pero no te desanimes porque, como siempre, sólo necesitas conocer (y aplicar) los métodos correctos.
Cómo usar sal y papel de aluminio para pulir plata deslustrada
El lado positivo es que no es necesario recurrir a productos químicos, que sí comercializan algunas marcas. Te aconsejamos que te mantengas alejado: además de ser bastante caros (y sabemos lo importante que es ahorrar, sobre todo hoy en día), tienen un efecto nocivo para la salud de personas y animales. El procedimiento a seguir para pulir la plata requiere de muy pocos elementos , los cuales son fáciles de encontrar. De hecho, el 99 por ciento de las veces ya los tendrás en tu despensa , aunque quizás nunca los hayas utilizado para este fin.
Intentemos arrojar luz sobre el tema, partiendo de lo necesario. El truco sólo requiere:
- recipiente;
- lámina de aluminio;
- sal de cocina gruesa;
- bicarbonato de sodio (opcional).
Comienza colocando papel de aluminio en el recipiente . Luego vierte en su interior un par de cucharadas de sal de cocina gruesa . Si los cubiertos requieren una intervención más agresiva, añade un poco de bicarbonato de sodio , cuyas propiedades quitamanchas y desengrasantes son reconocidas, en una dosis de dos cucharadas.
Ha llegado el momento de sumergir los objetos a tratar en la mezcla. Déjalos en remojo un rato, al menos entre 5 y 10 minutos . No existe un límite máximo, por lo que también puedes hacer que el compuesto actúe durante un intervalo más largo. Una vez finalizado el proceso, enjuagar y secar.
Como alternativa al procedimiento que se acaba de ilustrar, coloque papel de aluminio en el fondo de la cacerola , llénelo con agua y sal gruesa y déjelo hervir . En ese punto, puedes pulir la plata oxidada al entrar en contacto con el papel de aluminio.