

Si hay un material capaz de darle modernidad a nuestro hogar es el acero inoxidable , habitualmente elegido para la vitrocerámica, el frigorífico etcétera.
Sin embargo, por muy bonito y resistente que sea , muchas veces tiende a tener marcas y manchas y a perder todo su brillo original .
Por eso, hoy veremos juntos cómo pulir el acero del frigorífico quitando las marcas con un remedio que puedes hacer tú mismo.
vinagre blanco
El primer remedio capaz de pulir y eliminar las marcas que muchas veces encontramos en el acero del frigorífico es el vinagre blanco , que presume de un alto poder abrillantador .
Por tanto, basta con verter un poco de vinagre en un paño suave de microfibra, obviamente no abrasivo para no rayar el acero, y luego pasarlo por la superficie de acero de tu frigorífico .
En este punto, pasa un paño limpio humedecido en agua tibia y seca todo con cuidado con un paño limpio o papel absorbente: ¡el acero de tu frigorífico brillará como nunca!
Bicarbonato
Al igual que el vinagre, el bicarbonato de sodio también puede venir a tu rescate para hacer brillar el acero del frigorífico y eliminar posibles manchas, gracias a la ligera acción abrasiva que lleva a cabo y que puede eliminar esa molesta película opaca.
Luego vierte 3 cucharadas de bicarbonato en aproximadamente 1 litro de agua tibia, luego moja un paño en la mezcla resultante y pásalo por el refrigerador. En este punto dejar actuar unos minutos antes de secar cuidadosamente con un paño.
Nota : Evidentemente te recomendamos diluir bien el bicarbonato para evitar que raye el acero.
Jabón de Marsella
Después del vinagre y el bicarbonato, ¿cómo podría faltar el conocido jabón de Marsella, considerado el ingrediente básico del quitamanchas universal de bricolaje? De hecho, gracias a sus propiedades limpiadoras muy delicadas, es capaz de limpiar, quitar manchas y pulir superficies sin dañarlas.
Basta con verter 2 cucharadas de jabón líquido de Marsella en un cubo que contenga unos 500 ml de agua y luego sumergir un paño suave en la solución.
Luego, pásalo por tu refrigerador varias veces y usa un paño empapado solo en agua tibia para enjuagar la superficie. Por último, sécala con un paño limpio y… ¡qué brillo!
Zumo de limón
Después del bicarbonato de sodio, el vinagre y el jabón de Marsella, ¿cómo podía faltar el limón , el cítrico capaz no sólo de pulir sino también de perfumar? ¡Te recordamos, de hecho, que es capaz de eliminar todos los malos olores del baño de forma rápida y sencilla!
Luego, añade el jugo de dos limones en un recipiente que contenga 1 litro de agua y sumerge un paño suave en la solución así obtenida. Luego, pasa el paño sobre el acero del frigorífico y enjuaga con un paño empapado en agua tibia.
Por último, sécalo bien con un paño seco y… ¡ tu frigorífico de acero quedará reluciente en un abrir y cerrar de ojos!
Aceite de oliva
Un último remedio que recomendamos pasa por el uso de aceite de oliva , útil no sólo para condimentar platos sino también para pulir las superficies de acero de nuestro hogar, ya que se considera un abrillantador natural.
Luego añade unas gotas de aceite de oliva sobre un paño suave de microfibra y luego pásalo por tu frigorífico realizando movimientos circulares para eliminar las manchas.
Luego, deja actuar unos minutos y limpia con un paño suave humedecido en vinagre blanco para eliminar todos los restos de aceite. Por último, limpia con un paño humedecido en agua tibia y seca con cuidado para no dejar más marcas.
¿Y para pulir el fregadero?
Si quieres aprovecharlo y además darle brillo al fregadero, ¡aquí tienes un vídeo pensado para ti!
Advertencias
Le aconsejamos que consulte siempre las instrucciones de producción para asegurarse de no dañar la superficie de su frigorífico.
Evite esponjas abrasivas o lana metálica para la limpieza porque podría rayar el metal. También se deben evitar los detergentes corrosivos como los que contienen lejía o cloro.