Durante la estación fría, los radiadores son los aparatos que más se utilizan. Por eso hay que limpiarlos con regularidad para mantener su rendimiento. Por eso he ideado este truco natural para mantener los radiadores limpios e impecables.
Mantener los radiadores limpios es importante para mantener una buena calidad del aire en el hogar. Si tienes radiadores de hierro fundido, deberás realizar un mantenimiento muy regular para que sigan funcionando correctamente.
¿Cómo limpiar este tipo de radiadores? Aquí tienes un remedio natural que combina rapidez y sencillez para devolver el brillo original a tu aparato de calefacción.
¿Cómo limpiar los radiadores de hierro fundido?
Tener radiadores limpios en casa es esencial no sólo por razones estéticas, sino también para su salud. Cuando la calidad del aire es insalubre, puede repercutir en su salud.
Además, los radiadores sucios pueden consumir mucha más energía. Por eso hay que mantenerlos limpios para evitar que aumente la factura de la luz.
Sin embargo, si quieres limpiar tu radiador de hierro fundido sin el menor esfuerzo, aquí tienes el remedio natural que necesitas para ponerte manos a la obra de inmediato.
Abrillanta tus radiadores de hierro fundido: ¡el remedio infalible de todos los tiempos!
A la hora de limpiar los radiadores, no es necesario gastar en productos químicos tóxicos y caros. Hoy, te encantará conocer este remedio natural para limpiar con éxito tus radiadores. Para ello, empieza por apagar los aparatos.
A continuación, limpia el polvo de los aparatos con una aspiradora de boquilla fina. A continuación, elimina la suciedad más incrustada con un plumero o un cepillo.
Tras estos pasos, prepare una solución jabonosa mezclando 3 cucharadas de jabón de Marsella y medio litro de agua. A continuación, coloque paños debajo del radiador. Ahora, con una esponja y la solución limpiadora, limpie su radiador, aclárelo y séquelo bien.
Si tu radiador está lleno de manchas amarillas, puedes utilizar este truco de abuela. Se basa en migas de pan. Es un producto muy eficaz para limpiar y dar brillo a los radiadores de hierro fundido amarillentos. Coge una cucharada de pan rallado y frótala sobre las zonas amarillentas para eliminar las marcas.
También puedes hacer una pasta con bicarbonato de sodio y agua. Con un paño, frota las manchas con esta mezcla. Verás que las marcas desaparecen como por arte de magia.