El radiador , componente esencial de la calefacción del hogar, acumula con el tiempo polvo y suciedad que también podrían afectar a su funcionamiento.
En este punto, el radiador puede resultar muy difícil de limpiar, ¡pero no si utilizas jabón de Marsella como un aliado natural y potente contra la suciedad!
Hoy te cuento todo lo que necesitas saber sobre cómo limpiar el radiador por dentro y por fuera con jabón de Marsella para que no sólo quede como nuevo, sino que perfume toda la estancia.
Antes de comenzar
Realizar una limpieza profunda del radiador no es difícil, sin embargo antes de comenzar es importante tomar algunas acciones para optimizarlo al máximo.
Primero humedece 2 paños de microfibra , luego coloca uno debajo y otro detrás del radiador . Luego coge un plumero y quita todo el polvo.
Si no puedes retirarlo por dentro, puedes ayudarte de un secador de pelo o una aspiradora , tendrás que ponerlos a velocidad media y calor (en el caso del secador), manteniéndote a una distancia de seguridad.
Una vez que el polvo desaparezca, ¡la limpieza será muy fácil!
Manchas lejos
Una vez que el radiador está libre de polvo, abordamos las molestas manchas que pueden comprometer su aspecto.
El jabón de Marsella, con sus propiedades desengrasantes y limpiadoras, resulta un excelente aliado para esta tarea. Moje una esponja suave y ralle un bloque de jabón de Marsella sobre ella , luego frote suavemente las manchas.
Repite el paso varias veces si es necesario hasta que ya no tengas el más mínimo rastro de mancha, se disolverán sin dañar la superficie de tu radiador.
Si las manchas son especialmente rebeldes, también necesitarás añadir un poco de bicarbonato de sodio y ¡quedará perfecto!
para el interior
Además de la limpieza exterior, es fundamental prestar atención al interior del radiador , que es la parte más larga y molesta de los escalones.
Precisamente por eso te contaré cómo utilizar el método de la jarra , ¡fantástico para eliminar toda la suciedad del interior del radiador!
NB Antes de realizar este método, coloque un recipiente debajo del radiador para recoger toda el agua.
Luego prepara una mezcla de agua tibia y jabón de Marsella colocando 2 cucharadas en 500 ml , transfiere todo a una jarra y vierte delicadamente la solución dentro de los tubos del radiador para disolver los restos de suciedad o acumulaciones de cal.
Dejar actuar unos minutos antes de enjuagar abundantemente con agua limpia . ¡Este procedimiento no solo limpiará el interior de su radiador, sino que también ayudará a mantener una distribución uniforme del calor!
Adiós óxido
El óxido es uno de los enemigos más comunes de los radiadores , especialmente en zonas con mucha humedad.
También en este caso el jabón de Marsella resulta ser una valiosa ayuda en esta lucha contra la suciedad. Toma un cepillo de cerdas suaves y sumérgelo en una solución de 1 cucharada de jabón rallado diluido en 2 vasos de agua .
Frote con mucha delicadeza para eliminar hasta el último rastro de óxido, luego enjuague y seque con cuidado.
Para perfumar durante mucho tiempo
Como ya se ha comentado anteriormente, además de su eficacia en la limpieza, el jabón de Marsella aporta un agradable toque de frescor al ambiente .
Después de completar la limpieza del radiador, deje que el dispositivo se seque y, si lo desea, pase un paño de microfibra empapado en agua con un paño para frotar y páselo por la superficie externa.
A medida que se calienta, la fragancia del jabón se sentirá en toda la casa y permanecerá por mucho tiempo.
Una alternativa al perfume es también llenar el deshumidificador y poner en su interior unas escamas de jabón.
Advertencias
Pruebe primero los remedios en rincones discretos para asegurarse de no manchar ni dañar el radiador.