Las velas siempre han representado un elemento de serenidad y calidez, pero no es necesario limitar su creación únicamente a la cera. Con ingredientes sencillos y un poco de creatividad, puedes hacer una vela que parezca que nunca se apaga. Esta guía le enseñará cómo hacer una vela casera usando agua, aceite y materiales fácilmente disponibles.
Materiales esenciales para tu vela infinita
Para comenzar, asegúrese de tener los siguientes materiales y herramientas:
– Un recipiente de vidrio (puede ser un frasco o una botella pequeña)
– Agua (el agua del grifo está bien)
– Aceite de semillas (puedes optar por aceite de girasol u otro aceite vegetal)
– Una botella de plástico (preferiblemente pequeña y vacía)
– Papel absorbente (una tira para enrollar)
– Tijeras
– Decoraciones (como conchas, piedras, arena sintética o cualquier otro pequeño adorno que desees)
Asegúrate de tener todo lo que necesitas a mano para facilitar el proceso de creación.
Pasos para construir una vela que nunca se apague
Estos son los pasos a seguir para hacer tu propia vela infinita:
1. Preparación del recipiente: Comience colocando una fina capa de arena en el fondo del recipiente de vidrio. La arena no sólo actuará como base decorativa, sino que también ayudará a estabilizar los demás elementos.
2. Añade decoraciones: Coloca conchas, piedritas o arena sintética sobre la arena, dando rienda suelta a tu creatividad. Puedes elegir cualquier decoración que te guste para hacer tu vela única.
3. Verter agua y aceite: verter un poco de agua en el recipiente y luego agregar el aceite de semillas sobre el agua. Notarás que el aceite flota en la superficie del agua, lo cual es esencial para el funcionamiento de la vela infinita, ya que el aceite se quema lentamente.
4. Preparación del “filtro” de papel: tome la botella de plástico y corte la parte inferior. Haz un pequeño agujero en el centro de la parte cortada, lo suficientemente grande como para que pase un trozo de papel absorbente.
5. Hacer la mecha: Enrolla la tira de papel absorbente e introdúcela en el agujero de la botella de plástico. Esto servirá como mecha para tu vela. Coloque la botella, con la toalla de papel, sobre la superficie del aceite, asegurándose de que el papel solo esté en contacto con el aceite y no con el agua que está debajo.
6. Encender la vela: Enciende la toalla de papel y observa cómo empieza a arder. La vela continuará encendida ya que el aceite de semilla se repondrá automáticamente en la base de la mecha, manteniendo la llama viva durante mucho tiempo.
El secreto de la vela infinita
El funcionamiento de esta “vela infinita” se basa en el uso del petróleo como combustible. Cuando la toalla de papel está encendida, absorbe continuamente aceite de la superficie, alimentando la llama. Este mecanismo permite que la vela continúe encendida mientras haya aceite disponible , creando una atmósfera mágica y duradera.
Los beneficios de hacer una vela casera
Hacer una vela infinita no sólo es una actividad divertida, sino que también es una forma ecológica y económica de disfrutar de una luz cálida y acogedora, evitando la compra de velas desechables. Además, la posibilidad de personalizar tu vela con conchas, arena y otros materiales te permite crear un objeto decorativo único, perfecto también como idea de regalo .
¡Haz esta vela DIY y sorprende a tus amigos con una iluminación que nunca se apaga!