Cuando limpiamos la casa a menudo nos olvidamos de limpiar también los sofás. Aún así, deberíamos desinfectarlos con más frecuencia. Los usamos mucho y tienden a acumular polvo, restos de comida, migas, pelos y pelusas, que a la larga también pueden provocar malos olores. Sin mencionar las manchas. No siempre es fácil limpiarlos, pero por suerte puedes utilizar un champú seco casero para sofás , elaborado con unos sencillos ingredientes que seguro ya tienes en casa. Y si no los tienes, igualmente son fáciles de encontrar y cuestan muy poco.
Receta de champú seco para sofás
Antes de empezar a prepararlo, es importante señalar que si bien este champú seco para sofás puede ser adecuado para la mayoría de tejidos, siempre es buena idea probarlo primero en una parte pequeña y oculta del sofá para comprobar que no daña la tela ni los colores.
Considere también que hay ciertos tipos de tejidos (como los sofás de cuero ) que requieren productos específicos y tratamientos delicados. En estos casos lo mejor es seguir las instrucciones del fabricante.
Con esta premisa, aquí necesitarás conseguir estos ingredientes y equipos:
- bicarbonato
- almidón de maíz
- aceites esenciales al gusto
- vacío
- un cepillo de cerdas suaves
- un recipiente con tapa
Comienza mezclando bicarbonato de sodio con maicena , en partes iguales. De esta manera el champú seco podrá absorber los malos olores y la humedad . Luego añade unas gotas del aceite esencial de tu elección para darle al sofá un agradable aroma.
Ahora vierte esta solución en el recipiente con tapa, cerrándolo bien. Así que si te sobra un poco, también puedes usarlo en otras sesiones de limpieza.
Ahora aspira el sofá para eliminar hasta el último resto de suciedad y migas. Luego limpie con un paño limpio. Ahora tendrás que aplicar el champú en todas las superficies del sofá, ayudándote con el cepillo de cerdas suaves. No olvides la parte inferior de los cojines, reposabrazos y respaldo.
Deje actuar la solución al menos media hora, luego vuelva a aspirar y retire el champú seco. Y ya está: un sofá limpio, higienizado y perfumado. ¿Pero qué pasa si hay manchas? Teniendo siempre cuidado de probar primero la mezcla en una parte pequeña y escondida del sofá, podrás quitar esas manchas utilizando vinagre de vino blanco diluido en agua y un paño suave y limpio.