No hay nada peor que ver cómo el moho se apodera de determinadas zonas de tu hogar.
Dependiendo de la humedad presente en una habitación, es fácil que el moho prolifere de forma casi antinatural, multiplicándose sin el menor esfuerzo. A menudo ésta consigue crecer incluso en los lugares más impensables, como la bañera.
Mucha gente piensa que el material de la bañera no debería favorecer el desarrollo de este hongo, pero en realidad el ambiente húmedo propio de este mueble de baño es realmente ideal para el moho.
Pero, ¿cómo podemos eliminar este elemento molesto y nocivo, asegurando la mayor limpieza posible? Afortunadamente, para quienes no quieran utilizar productos químicos corrosivos y peligrosos, es posible elaborar un compuesto casero, perfecto para esta eventualidad.
Requerido
1 Alcohol orgánico
2 Peróxido de hidrógeno
3 Aceite de árbol de té
4 Un recipiente con atomizador
Después de haber conseguido los distintos elementos necesarios para crear este quitamoldes casero, solo te queda seguir la receta y conseguir tu aliado perfecto para la limpieza de la bañera.
Procedimiento
Mezcle una cucharadita de aceite de árbol de té y unos 60 ml de peróxido de hidrógeno en un bol. Después de combinar los dos elementos, agregue también una cucharadita de alcohol orgánico. Continúe mezclando todo, asegurándose de que quede bien mezclado.
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Vierte la mezcla que creaste en el recipiente del rociador y agita todo vigorosamente antes de usarlo para limpiar la tina. Rocía con cuidado el producto que creaste, centrándote con cuidado tanto en las zonas donde se ve el molde como en las esquinas. Asegúrate de rociar también la mezcla a lo largo de los bordes de la tina, de manera que cubra prácticamente toda su superficie.
Después de rociar este removedor de moho, deberás darle un tiempo para que actúe. Por lo general, unos diez minutos son suficientes, pero si la infestación de moho es más opresiva, espere unos minutos más. Pasado este tiempo, frota todo con un paño limpio, luego lava la tina como lo harías normalmente y sécala con cuidado.
Este proceso mantendrá a raya el moho durante mucho tiempo y tendrás la seguridad de que tus baños quedarán mucho más limpios y relajantes.