¿Cómo calentar el semillero para que las plantas germinen más fácil y rápidamente?

Si quieres cultivar plantas rápidamente y al abrigo de la intemperie, puedes utilizar un semillero.

E incluso si no tienes un pulgar verde, ¡déjate tentar por esta técnica infalible para germinar rápidamente tus plantones en un semillero!

Semillero: ¿qué es exactamente un semillero?

Un semillero es un mini espacio para cultivar plantas antes de cultivarlas en el suelo. En este espacio, es fácil manejar y regar las plantas.

Sin embargo, a veces tu semillero no ha dado los resultados que esperabas, quizá por falta de experiencia o por métodos inadecuados.

Con el invierno a la vuelta de la esquina, vamos a revelarte algunos secretos de los expertos sobre cómo acelerar la germinación de las plántulas en tu semillero.

¿Cómo germinar rápida y eficazmente las plántulas en el semillero?

Para entender cómo germinar las plántulas en un semillero, tomemos el ejemplo de las semillas de tomate y pimiento.

El primer paso es llenar el semillero de tierra. Ahora estás preparando un lecho cálido para tus semillas. A continuación, añade un poco de estiércol y mantillo para proteger la tierra. De esta forma, la tierra genera calor de forma natural.

A continuación, utiliza agua caliente para aumentar el calor del suelo, que puede durar hasta dos meses. No olvides cubrir la capa de paja y estiércol con cal. Se trata de un producto esencial para limitar la proliferación de hongos nocivos. También generará más calor.

A continuación, necesitarás arena fina para que el sustrato sea más homogéneo y conserve la humedad. Por último, necesitarás un poco de tierra para igualarlo todo. A continuación, riega bien.

Puedes cubrir el lecho calentado con tela de nailon no textil sin tocar la tierra. También puedes hacer una estructura con tablones de madera para mayor protección. Una vez colocada la estructura, riega y planta con tierra para macetas de buena calidad.

Ahora es el momento de sembrar las semillas de tomates y pimientos. Basta con colocarlas en el suelo y cubrirlas con un poco de tierra. Mantén la temperatura a 25 grados para que las semillas germinen.