Se acercan las heladas y la nieve: así tu chimenea quedará profundamente limpia y brillante
Las heladas y la nieve están a la vuelta de la esquina y es precisamente por eso que muchas personas han decidido utilizar la chimenea. ¿Pero sabías que existe una manera de limpiarlo a fondo? Con este remedio quedará limpio y brillante: descubramos más.
No hay nada mejor que una fantástica tarde de invierno con amigos y una chimenea encendida. Pero hay que recordar que si quieres utilizarlo el mantenimiento también es importante. Es fundamental porque si no se limpia con frecuencia, es posible que no funcione perfectamente y tengas problemas de calefacción. ¿Cómo podemos limpiarlo a fondo? Existe un método fantástico que además optimiza el tiempo: descubramos más.
LIMPIEZA DE LA CHIMENEA: ASÍ FUNCIONA
Si la chimenea no se limpia adecuadamente pueden surgir diversos problemas, no sólo para la casa sino también para la salud. Por supuesto, existen varias soluciones que pueden ayudar, pero aún así se necesita un poco de “esfuerzo” para dejarlo completamente limpio.
Como sabes, después de utilizar la chimenea es necesario eliminar todas las cenizas y el hollín. Para esta operación deberás utilizar guantes para protegerte del polvo y retirar todo aquello que pueda ensuciarse. A continuación deberás utilizar una escoba y un recogedor para retirar todas las cenizas de la chimenea y tirarlas a los residuos orgánicos.
Este es sólo el primer paso para eliminar la suciedad de la chimenea. Para limpiarlo en profundidad es necesario seguir un procedimiento sencillo y rápido. De esta manera obtendrás un resultado realmente excelente: descubramos más.
El procedimiento para limpiar la chimenea: todos los detalles.
Para limpiar adecuadamente la chimenea, es necesario utilizar algunos trucos. Por ejemplo, siempre es mejor espolvorear un poco de sal sobre la madera para que se produzca menos hollín y la ceniza sea mucho más fácil de quitar.
Para limpiar la chimenea necesitas un cepillo que humedeces con agua y vinagre. Este último tiene propiedades desengrasantes y limpiadoras, por lo que se utiliza en la mayoría de las tareas del hogar.
Recuerda limpiar la chimenea periódicamente porque si no se mantiene correctamente también puede afectar al funcionamiento de la chimenea y por tanto a la calefacción. Después de esta operación, enjuague la chimenea con agua e inmediatamente verá el increíble resultado.
Si no tienes vinagre disponible, también puedes utilizar tres cucharadas de detergente líquido para lavavajillas y 100 gramos de bicarbonato de sodio. Mezcla estos dos ingredientes en un bol y obtendrás una mezcla fantástica que te ayudará a eliminar todos los depósitos, siempre usando un cepillo por supuesto. Con este producto podrás tener una chimenea limpia y reluciente en tan solo unos pasos. Además, ahorras mucho dinero.