Asesino silencioso: ¡así se llama esta planta de interior tan común!

Muchos de nosotros disfrutamos con las plantas de interior de elegantes flores y exuberante follaje. Sin embargo, pocas personas saben que estas espléndidas plantas pueden ser peligrosas.

Si tiene niños o mascotas en casa, debe evaluar siempre la toxicidad de las plantas antes de introducirlas en el hogar. De lo contrario, el riesgo puede ser enorme.

Dieffenbachia, la “caña muda” o “asesina silenciosa”: la planta de interior que no hay que meter en casa

La Dieffenbachia es una planta de interior muy común. Perteneciente a la familia de las aráceas, esta planta es famosa por su bonito follaje abigarrado. Sin embargo, esta planta es muy peligrosa para las personas y los animales.

La Dieffenbachia procede de las regiones tropicales de América Central y del Sur. Aunque a primera vista esta planta es simplemente magnífica, es muy peligrosa debido a la presencia de cristales de oxalato de calcio en sus tejidos.

¿Por qué el apodo de “asesino silencioso”?

También conocida como “bastón mudo”, “bastón mudo” o “bastón del silencio”, la dieffenbachia también es conocida como “asesina silenciosa”. Estos apodos se han acuñado debido a dos características de esta planta.

Por un lado, los cristales de oxalato cálcico se infiltran en el organismo de forma silenciosa y maliciosa. Por otro, la ingestión de las hojas provoca un edema de la lengua que dificulta la pronunciación de las palabras.

De hecho, esta planta contiene una savia alergénica para las mucosas. Si salpica los ojos, puede provocar dermatitis. Puede hinchar los párpados y causar inflamación de la córnea.

Si se ingiere, el líquido puede provocar lesiones, quemaduras, ulceraciones y edema de boca, lengua y laringe. En poco tiempo, estos síntomas pueden provocar asfixia y muerte.

¿Cómo debe tratarse la dieffenbachia para evitar riesgos?

Si tiene niños pequeños o animales domésticos, le recomendamos que mantenga este tipo de planta fuera de casa.

Si le gusta esta planta y está deseando cultivarla en su casa, manténgala fuera del alcance de los niños pequeños y las mascotas.

Por ejemplo, colóquelas en estantes altos o encima de los muebles. También puedes colgarlas para que los animales no puedan cogerlas.

Cuando cuides de tu planta, protégete con guantes y gafas.