El aloe vera es una planta famosa por sus exclusivos beneficios para la piel y la salud. Además, es una de las plantas de interior de moda hoy en día.
¿Ya tienes una planta de aloe vera en casa? ¿Por qué no propagarla para cultivar más plantas? La propagación por esquejes es muy fácil de hacer.
Descubre en este artículo cómo propagar el aloe vera mediante la técnica del esqueje.
¿Cuál es el procedimiento para tomar esquejes de aloe vera?
Si sacas esquejes de tu planta de aloe vera, puedes ahorrarte mucho dinero porque haces el esqueje tú mismo. Aquí tienes los pasos a seguir:
Preparar las herramientas
Antes de empezar esta operación, tendrás que reunir todos los materiales que necesitarás para el corte. Necesitarás :
o Un cuchillo limpio y afilado
o Una maceta o contenedor adecuado para la nueva planta
o Tierra bien drenante específica para cactus y suculentas
o Una planta de aloe vera sana
Elegir un tallo para cortar
Tome su planta de aloe vera y elija una rama en perfecto estado de salud. Debe tener unos centímetros de largo y algunas hojas.
Cortar la rama
Una vez elegida la rama, coge un cuchillo limpio y afilado y córtala justo cerca de la base de la planta madre. Haz un corte limpio.
Secar el esqueje
Una vez cortado el esqueje, colócalo en un lugar seco y alejado de la luz solar directa durante 24 horas. Esta es una forma de secar el esqueje para evitar el riesgo de infección.
Plantar el esqueje
Una vez que la rama cortada se haya secado bien, es hora de plantarla en la maceta ya preparada con tierra especial para cactus. Necesitas una maceta lo suficientemente grande para que tu futura planta crezca correctamente.
Riega correctamente
Una vez plantado el esqueje, riega muy ligeramente. Debes evitar regar en exceso, ya que el aloe vera es una planta suculenta que necesita tierra seca entre riego y riego.
Colócalo en un lugar bien iluminado
Coloque la maceta con el esqueje en un lugar luminoso, pero sin luz solar directa, durante los primeros días.
Espere
Al cabo de unas semanas, deberías tener un esqueje que eche raíces y empiece a crecer. No olvides regar cuando la tierra esté seca.