El ciclamen es una de las variedades de flores más resistentes y una de las más características de la estación invernal. Es una planta muy fácil de cuidar, ya que incluso los que no tienen un pulgar verde pueden arreglárselas.
Durante los duros meses de invierno, tu jardín o balcón lucirán preciosos. Hasta los vecinos se pondrán celosos. Sin embargo, para lograr este objetivo, es necesario seguir las instrucciones básicas de cuidado que aprenderás aquí.
6 consejos para un ciclamen bonito y vigoroso
Si estás pensando en cultivar ciclamen en el jardín, te recomendamos que elijas especies silvestres.
Esta planta prefiere un lugar sombreado, pero también resguardado del viento y del frío. Sin embargo, asegúrate de proporcionarle mucho aire para evitar la formación de moho.
El ciclamen debe plantarse en un suelo bien drenado y húmedo. No dudes en añadir arena si tu suelo es arcilloso.
Elija estiércol duro o abono convencional para abonar en el momento de la plantación.
Compruebe siempre el estado del suelo con un dedo. Si está moderadamente seca, es señal de que necesitas regarla. Cuando riegue, evite hacerlo en exceso, ya que puede provocar la pudrición de las raíces.
No es necesario regar durante la temporada de reposo vegetativo. También debes aprovechar para quitar los bulbos que necesiten trasplante, así como para limpiar la planta quitando las hojas y flores secas.
Por último, no olvide abonar la planta una vez al mes.
Conocer mejor el ciclamen: planta de invierno por excelencia
Esta planta se presenta en 20 especies diferentes. Existen variedades de exterior, de pequeño tamaño, a diferencia de las destinadas a la plantación de interior. Para su información, si opta por cultivar la planta en interior en una maceta, asegúrese de mantener la temperatura interior por debajo de 15°C.
Como las demás plantas decorativas, el ciclamen no tolera la exposición directa al sol ni las fuentes de calor. Plante los plantones entre julio y septiembre.
En este caso, combinarás las semillas con un poco de arena y tierra. Riegue ligeramente y envuelva en plástico transparente para mantener la temperatura adecuada para que la planta de ciclamen crezca bien.
No obstante, no olvides retirar el plástico dos veces por semana para garantizar la ventilación y el riego al mismo tiempo.