
Muchas veces por distracción y porque nuestra vida agitada nos hace estar siempre de prisa, dejamos la olla en el fuego más tiempo del necesario y la encontramos toda quemada. Limpiar sartenes quemadas no es una tarea nada fácil. Esto es por si no conocías algunos trucos que te ayuden a darle brillo sin demasiado esfuerzo. Vamos a descubrirlos.

Trucos naturales para reavivar las ollas quemadas
Como suele ocurrir, las mejores soluciones se esconden en los ingredientes que tenemos en casa. En este caso, para limpiar ollas quemadas solo necesitas combinarlos y crear el limpiador natural perfecto. Los dos primeros ingredientes que combinaremos son bicarbonato de sodio y vinagre. El bicarbonato de sodio mostrará sus cualidades abrasivas y delicadas y su poder blanqueador, mientras que el vinagre neutralizará los olores y eliminará aceites, gérmenes y bacterias.
Para utilizarlos, vierte media taza de vinagre blanco en la sartén, agrega una taza de agua y deja hervir. Retirar del fuego, verter el bicarbonato en la sartén, frotar y enjuagar para eliminar todos los residuos.

El bicarbonato de sodio también se puede utilizar en combinación con limón . Extiéndelo sobre la superficie quemada y frota con medio limón. Si quedan manchas oscuras persistentes, precalentar la sartén con un poco de vinagre.
El siguiente método implica utilizar una papa cruda y sal gruesa. Enjuague la sartén quemada, corte una papa por la mitad y espolvoree una cucharada de sal gruesa encima. Frote la patata en la sartén durante unos minutos, enjuáguela y añada un poco de aceite de oliva para proteger la superficie.
Pasemos a otro truco muy efectivo, sobre todo cuando se trata de ollas de hierro. Espolvorea un poco de sal sobre la superficie de la sartén, enrolla un trozo de papel de aluminio y úsalo para frotar las zonas quemadas.
Por último, puedes preparar una combinación ganadora , utilizando bicarbonato de sodio, vinagre blanco y jugo de limón. Mezcla todos los ingredientes hasta obtener una pasta espesa, aplícala sobre las partes quemadas, deja actuar unos minutos, frota y enjuaga con agua caliente.