No hay nada más seductor que unos calcetines blancos para completar un look. Pero los calcetines no siempre son tan blancos a causa de la transpiración. Para dejarlos como nuevos, no hace falta comprar productos caros. Estas 4 soluciones ingeniosas son todo lo que necesitas para que tus calcetines luzcan como nuevos.
Utilizar bicarbonato de sodio
El bicarbonato de sodio es muy conocido por su enorme poder blanqueador. Para blanquear tus calcetines, mezcla una cantidad de agua con bicarbonato de sodio. Sumerge los calcetines en ella durante una media hora y acláralos. Ya sólo queda meterlos en la lavadora.
Vinagre blanco: para blanquear los calcetines
¿Has pensado alguna vez en utilizar vinagre blanco para dar brillo a tus calcetines? Coge un recipiente grande y mezcla agua tibia con media taza de vinagre blanco. Deja los calcetines en remojo durante unas horas. Después, lávalos a mano o mételos en la lavadora.
Ácido cítrico: para eliminar el aspecto grisáceo de los calcetines
Para que los calcetines blancos sin dibujo queden como nuevos, puedes recurrir al ácido nítrico o al zumo de limón. Para ello, coge un litro de agua y añádele ácido nítrico o zumo de limón. Puedes aplicar la solución sobre las marcas indiscretas de los calcetines o sumergirlos directamente en la mezcla. Déjalo durante media hora y luego lava los calcetines con cuidado.
Agua salada: para unos calcetines sublimes
Aunque el tejido de tus calcetines sea frágil, no hay riesgo de estropearlos con este truco sencillo pero eficaz. Prepara una solución de 1.000 ml de agua tibia y 20 g de sal. Cuando la sal se haya disuelto, puedes añadir un poco de detergente líquido. Sumerge los calcetines en esta solución y déjalos unos treinta minutos. Puedes lavarlos enseguida o meterlos en la lavadora.
Estos pequeños trucos a base de productos naturales son muy eficaces no sólo con los calcetines, sino también con otras prendas blancas opacas. Conseguirás que brillen como nuevas.
¿Te animas a probarlos?