3 trucos sencillos y naturales para limpiar y eliminar la grasa de la plancha sin ningún esfuerzo.

La plancha es un utensilio de cocina esencial para cocinar carne, pescado y verduras. Ya sea de hierro fundido o de otros materiales, es fácil de usar.

Lo único que hay que hacer es colocar los alimentos que se van a cocinar sobre la superficie precalentada de la plancha. La ventaja de este método de cocción es que no es necesario utilizar mucho aceite, mantequilla u otras grasas.

Luego, una vez terminada la cocción, puedes encontrar restos de comida en la superficie de tu utensilio que son muy difíciles de eliminar.

¿Cómo limpiar bien tu plancha de asar sin dañar la superficie? ¡Estos 3 métodos te encantarán!

¿Cómo eliminar eficazmente los restos de comida que se pegan a la plancha?
Para limpiar bien la plancha, la primera técnica es utilizar agua. Sin embargo, no hay que precipitarse a verter el agua sobre la plancha caliente.

De hecho, tienes que dejar que la plancha se enfríe un poco antes de cubrirlo todo con agua. A continuación, espere un rato, ya que el agua ablandará cualquier residuo persistente.

Inmediatamente después, al frotar la superficie con una esponja no abrasiva, todo saldrá a la perfección. Termine la operación de limpieza con jabón, que eliminará cualquier residuo grasiento. Aclara y seca: ¡tu plancha de asar estará como nueva!

Otros remedios eficaces para limpiar la plancha

En las redes sociales puedes encontrar una serie de consejos extraños pero muy populares. Uno de ellos es utilizar cubitos de hielo. A primera vista, puede parecer insólito, pero es una forma muy eficaz de mantener tu plancha de asar limpia e impecable.

¿Qué procedimiento debo seguir? Cuando la plancha esté caliente, pero no demasiado, coloque 3 ó 4 cubitos de hielo. Luego, con un cucharón, pásalos por toda la superficie de la plancha.

Gracias al calor aún presente, los cubitos acabarán derritiéndose y ablandando la suciedad. A continuación, utiliza una esponja suave para limpiarlo todo. El resultado: ¡una plancha como nueva sin demasiado esfuerzo!

Si tienes una plancha de hierro fundido, te recomendamos que utilices sal y papel de cocina. Coge la plancha caliente y échale sal por encima. A continuación, frote suavemente la superficie con papel de cocina. Así eliminarás los restos de comida.

A continuación, lávela como de costumbre. Y en pocos minutos tendrás una plancha limpia y libre de suciedad.