¿Tiene plantas verdes en casa? Viven como cualquier otro ser vivo y necesitan cuidados y protección especiales para prosperar.
Sin embargo, para evitar que este mantenimiento se convierta en una pesada carga, puedes recurrir regularmente a métodos inteligentes que te ahorren tiempo.
De hecho, hay una serie de trucos naturales y rentables que puedes utilizar para tratar tus plantas y tu espacio verde de forma inteligente. Si los pruebas, una cosa es segura: ¡los convertirás en parte de tu rutina de jardinería!
Papel absorbente para germinar semillas
Cuando cultivas semillas, sólo unas pocas de los cientos que siembras germinarán. Para evitar que los pájaros o los roedores se coman tus semillas, debes utilizar esta sencilla técnica de germinación.
Sólo tienes que colocar los granos entre dos capas de papel de cocina. A continuación, riégalos cada 2 días para mantenerlos húmedos sin empaparlos. Al cabo de unos días, las semillas germinarán ante tus propios ojos.
Restos de lápices afilados para macetas
Cuando le saques punta a los lápices, sobre todo a los de color neutro, ¡no tires los restos! Apártalos y utilízalos en macetas.
Puedes convertir los residuos en mantillo para evitar que crezcan malas hierbas. El mantillo también ayuda a conservar la humedad del suelo y a proteger las plantas del frío.
También se dice que los recortes de los lápices afilados actúan como un potente repelente de insectos. Son beneficiosos si los incorporas al suelo o dejas que se descompongan de forma natural.
Aceite de neem para cuidar tus plantas
El aceite de neem se considera un producto natural muy beneficioso para las plantas. Tiene innumerables beneficios para las plantas. Derivado de la planta Azadirachta indica Juss, el aceite de neem puede utilizarse tanto en plantas como en animales.
Por lo que respecta a las plantas, este producto es un pesticida natural muy eficaz gracias a sus compuestos activos, en particular los triterpenos y los limonoides. Basta con pulverizarlo sobre las plantas para eliminar directamente los parásitos.
También se puede utilizar como inhibidor de fagos, regulador del crecimiento e intimidante para los insectos que ponen huevos en las plantas.
