Aunque evite limpiar los cristales a diario, siempre llega un momento en que tiene que ocuparse de su limpieza. Desde luego, no es una de las tareas más agradables, ya que requiere una atención especial, sobre todo cuando la suciedad es obstinada y no desaparece. También hay rincones y grietas a los que es muy difícil acceder. Pero, ¡no te preocupes! Hoy te voy a mostrar algunos consejos increíbles para eliminar toda la suciedad de cada parte de tus ventanas.
Con un cepillo
El primer paso es eliminar el polvo que es el principal causante de la suciedad en estas zonas. Para evitar pasar horas y horas eliminándolo con métodos poco efectivos, te recomiendo encarecidamente que utilices un cepillo. El cepillo que usas para fregar el suelo puede funcionar, pero tienes que limpiarlo bien para no empeorar la situación. Para ello, pásalo por las rendijas y esquinas de las ventanas. Verás que el polvo se desprenderá con facilidad. Después de esta etapa, la mayor parte del trabajo está hecho.
Utiliza un cepillo de dientes
Para las esquinas y ángulos estrechos, puedes obtener un buen resultado simplemente utilizando un paño. Este accesorio de limpieza puede ser eficaz en caso de suciedad no muy resistente. Si el polvo forma una mancha resistente, deberá elegir un accesorio más apropiado. Puede utilizar un cepillo de dientes. Puede llegar a los rincones más pequeños y te dará un resultado eficaz en poco tiempo.
Método de la esponja
Además del cepillo de dientes, también puedes optar por el método de la esponja. Es un truco que puede facilitarte la tarea en casa.
Para este método, necesitas una esponja clásica, es decir, con un lado amarillo suave y otro verde más rugoso. Coge un rotulador y haz 4 puntos uniformemente espaciados a lo largo de la cara horizontal de la esponja. A continuación, corta la parte de la esponja que va desde estos puntos hasta la parte abrasiva. Extiende las tiras creadas con la esponja unas sobre otras. Este es un truco fantástico que eliminará hasta la suciedad más difícil.
Para estos 3 métodos, puedes ayudarte del vinagre o de la mezcla de bicarbonato de sodio con jabón de Marsella.